La formación de nuevas partículas en la atmósfera es una de las incertidumbres más significativas en los modelos climáticos.
Aunque se sabe desde hace dos décadas que también los óxidos de yodo forman partículas en la baja atmósfera, la inclusión de este proceso en modelos químico-climáticos se ha visto impedida hasta ahora por el desconocimiento del mecanismo de conversión de gas en partícula.
El estudio publicado en ‘Nature Communications’ se basa en experimentos de laboratorio en los que se observa la transición entre moléculas yodadas precursoras en fase gaseosa y clústeres moleculares de creciente tamaño.